Antes y después de Carillas Dentales
La sonrisa es una parte muy importante de nuestro aspecto físico, por no hablar de la enorme cantidad de ventajas que tiene sonreirle a la vida. Pero existen patologías que pueden afectar al aspecto natural de nuestra sonrisa, ya sea por alteraciones en el color o la forma de uno o más dientes. El antes y después de las carillas dentales pueden cambiarte la vida por completo.
Para resolver estos problemas, y lucir una buena sonrisa, existen varios tratamientos estéticos siendo uno de ellos la aplicación de carillas dentales. En este artículo queremos despejar todas las dudas sobre este tratamiento, para que sepas cómo recuperar tu sonrisa y sobre todo mantenerla.
Aspectos a tener en cuenta antes del tratamiento con carillas dentales
Primero de todo respondamos a:
¿Qué son las carillas dentales?
El tratamiento con carillas dentales consiste en la adhesión de unas láminas finas, normalmente de resina o porcelana, sobre la superficie exterior del diente. Estas carillas dentales se moldean de manera totalmente personalizada a cada diente.
Los materiales con los que se fabrican simulan el esmalte para que no se note la diferencia entre una carilla y un diente natural, manteniendo así una sonrisa más armoniosa.
Ahora que tenemos claro qué es, vamos a ver
¿Para qué sirve el tratamiento con carillas dentales?
La función de la carilla dental es cubrir el diente, ocultando su aspecto y simulando un diente natural y sano. Se aplica en casos de:
- Manchas o cambios de color en la dentición
- Fisuras o fracturas dentales
- Diastema o separación entre dientes
- Dientes torcidos o desgastados
Se recomienda a pacientes que buscan mejorar el aspecto de sus dientes, sobre todo en casos leves, cuando se quieren soluciones a corto plazo o en pacientes que no quieren ser sometidos a tratamientos más complejos como la ortodoncia.
Ahora bien, cada boca es diferente y no todas las necesidades son iguales, así que vamos a ver a continuación qué tipos de carillas existen:
Carillas de resina o composite
Esta carilla se confecciona en la propia consulta con resina acrílica, un material altamente moldeable. Se van aplicando capas sobre el diente y moldeándolo, hasta conseguir el resultado deseado.
Es la opción más económica y rápida de aplicar. Además es reversible ya que no afecta al estado natural del diente. Su duración media suele ser de unos 5-10 años, aunque todo dependerá del cuidado posterior.
Carillas de porcelana
Esta carilla es la más fuerte y resistente, gracias a las propiedades de la cerámica. Su coste es mayor pero su colocación brinda resultados casi permanentes y no requiere de tanto mantenimiento. Duran una media de 15-20 años.
Al contrario que las anteriores, estas son irreversibles ya que para colocarlas se ha de preparar previamente el diente (tallado) bajo anestesia. Por lo tanto requieren de más visitas a la clínica para su diseño, preparación y colocación.
Microcarillas o carillas sin tallado
La odontología no para de evolucionar y gracias a ello contamos con las revolucionarias microcarillas, las más demandadas hoy en día.
También fabricadas con cerámica, su principal diferencia radica en que son ultrafinas y se colocan sobre el propio diente, evitando tener que tallarlo. Así es posible aplicar carillas altamente resistentes y duraderas de una manera más rápida, reversible y sin necesidad de aplicar anestesia.
Cuidados después del tratamiento con carillas dentales
Unos buenos hábitos de salud bucodental serán los que ayudarán, junto con la calidad del tratamiento aplicado, a que las carillas se mantengan en buenas condiciones y duren más tiempo:
1.Las carillas de composite tienden a adquirir tinción con el tiempo, sobre todo si se es fumador o se consumen frecuentemente bebidas o alimentos con pigmentos (café, curry, vino tinto, frutos rojos, etc.).
2. El cepillado exhaustivo tras cada comida, junto con el uso de hilo dental o cepillo interproximal y un buen enjuague bucal son muy importantes para mantener una buena estética dental.
3. Cuidado al comer alimentos duros o utilizar los dientes como una herramienta, ya que se corre el riesgo de despegar o incluso fracturar la carilla dental. Aunque no es común que ocurra, es preferible ser previsor y no forzar la dentadura.
4. Si padeces bruxismo (cuando se aprieta la mandíbula de manera involuntaria, al dormir o en situación de estrés) deberás usar una férula de descarga para evitar la tensión mandibular y el desgaste de tus dientes y carillas.
Especialistas en Carillas Dentales en Manresa
Como has podido comprobar, existen muy pocos inconvenientes a la hora de plantearse un tratamiento con carillas dentales. Se trata de un tratamiento breve, conservador, con resultados duraderos y resistentes, y que permite recuperar y lucir una sonrisa bella y natural.
En Clínica Junyent somos especialistas en odontología estética y contamos con las últimas tecnologías para realizar el mejor diagnóstico y ayudarte a recuperar tu mejor sonrisa.